En el comienzo de April, visite el museo de arte de Philadelphia, Pennsylvania. El edificio, de tres pisos, tenía pasillo tras pasillo de arte Europeana, de arte Americana, de arte de China y India y partes de África. Me tardó dos horas encontrar el rincon de arte moderna Mexicana. Solo tenia 6 pinturas.
Me di cuenta que hasta cuando se trata de arte, los Mexicanos siempre son los que tienen que vivir en el oscuro, en los rincones, en los bordes de la sociedad. Siempre se siente como si nos están escondiendo, como si no existe suficiente tiempo para escuchar nuestras historias en este país.
Durante mi visita al museo, encontré The Double. El Mexicano, Roberto Montenegro, pinto esta pieza en 1938, y hoy en dia, no se sabe mucho de el significado. Cuando yo vi la pintura, me recordó de mi nacionalidad, de que a veces no puedo descifrar los puntos de mi identidad. Me vi a mi misma en El Doble. Vi una mujer Mexicana, vi nuestra fortaleza, vi que siempre encontramos la manera de brillar en toda la oscuridad. Observe esta pintura y senti dos partes de mi corazón llamando por mi alianca. Observe esta pintura, y trate de encontrar raíces que podrían sostener me a mi tambien.
Pero para mi, una chica nacida Americana con sangre que siempre quiere regresar a casa, encontrar mi identidad, encontrar mi paiz, no es simple.
Mi familia es de Mexico, se ve en nuestra piel, se olle en nuestro acento, se siente en nuestra comida. Y yo, ciudadana de un país que no siente sympathia para México, que solo sabe decirnos que debemos de uyir. A veces no soy suficiente Americana y a veces no soy suficiente Mexicana.
The Double parece tener una máscara, y aveces pienso que esa es la única forma cómo sobrevivir en este país. El color de sus labios, la textura de su pelo; todo eso se esconde tras una máscara genérica, y hoy en dia, asi se siente vivir en los EEUU. Se siente como que debo de fingir ser Americana, como que debo de esconder las partes más bellas de mi ser para poder pertenecer a los EEUU.
Para mi familia, Mexico es una herida que todavia no ha sanado. Mis abuelos, mis tíos, nunca mencionan nuestra tierra. Todavía existe mucho que están tratando de olvidar. Para mi, la frontera corre por todo mi cuerpo; me recuerda de lo que fuimos, y todo lo que todavía estamos tratando de cer. Ellos tratan de olvidar, y cada dia mi corazon late mas fuerte, late con la necesidad de recordar a México, de recordar todo nuestros colores, de vivir sin miedo de quien somos.
Yo no se como ser Americana, y no se como ser Mexicana. Todavía estoy tratando de descifrar si tengo el derecho de ser las dos cosas.
Comments